Malos hábitos que envejecen
Fumar, beber alcohol, dormir mal, ser sedentario, exponerse mucho al sol…
Fumar, beber alcohol, dormir mal, ser sedentario, exponerse mucho al sol…
La receta de la eterna juventud aún no ha sido inventada, pero si se conocen algunos hábitos que aceleran el proceso natural de envejecimiento. Entre ellos están beber alcohol en exceso, fuma, no dormir bien, etc.
Alcohol
El consumo regular y excesivo de alcohol se vincula no sólo con serios problemas de salud como la cirrosis, sino además con una aceleración del envejecimiento físico, además de con un deterioro mental. Según un estudio publicado recientemente (enero de 2014) en la revista Neurology, el cual fue realizado a 5.000 británicos en el lapso de 10 años, las personas que beben mucho presentan un deterioro agregado de 2 años en las habilidades mentales y 6 años para la memoria.
Sedentarismo
El sedentarismo se asocia con un mayor riesgo de una gran cantidad de enfermedades entre las que se incluyen obesidad, enfermedades cardiovasculares, entre otras. Pero además según una investigación publicada en Archives of Internal Medicine, practicar menos de 200 minutos a la semana de actividad física causa una aceleración del deterioro corporal lo cual se asocia con un desarrollo prematuro de hipertensión, cáncer, osteoporosis y diabetes.
Insomnio
El no dormir se asocia con un envejecimiento prematuro de la piel, dado que mientras se duerme se libera una hormona que estimula la producción y renovación de colágeno, especialmente en la piel del rostro.
Exceso de sol
Estar bronceado es para muchos sinónimo de salud. Sin embargo, el exceso de sol provoca envejecimiento prematuro de la piel. Líneas de expresión muy marcadas, manchas, engrosamiento de la piel, arrugas y cáncer de piel son algunas de las consecuencias del sol.
Fumar
Fumar tiene un efecto directamente negativo sobre el aspecto de la piel, pero no sólo lo empeora estéticamente sino que además la envejece: La vuelve más quebradiza, áspera e inflexible. Según un estudio publicado en la revista Plastic and Reconstructive Surgery el hábito de fumar se asocia con una aceleración de 5 años en el envejecimiento.
Estrés
El estrés está asociado con la aparición de arrugas, marcas y líneas de expresión, canas y caída del cabello. Según un estudio de investigadores de la Universidad de California que analizaron dos grupos de mujeres: Uno sometido a estrés permanente y otro expuesto a bajos niveles de tensión, hallaron que los telómeros de las mujeres sometidas a mayor estrés pueden llegar a envejecer hasta 10 años más rápido.
No desayunar
Este es un grave error que cometen muchas personas. Es muy conocido aquello de que el desayuno es la comida más importante del día y es verdad. Al no desayunar el organismo se nutre de las reservas de proteínas incluidas la de la piel y el colágeno, lo cual reduce la elasticidad y flexibilidad de la piel.
Rencores
Según un estudio publicado en Journal of Behavioral Medicine, las personas rencorosas presentan un incrementó en la actividad de los sistemas nerviosos, lo cual redunda en más consumo de medicamentos y una reducción en la calidad del sueño.
Muchos dulces
Una alimentación en la que haya un consumo excesivo de dulces no solamente se asocia con un aumento de peso, sino además con mayor riesgo de diabetes y problemas en la piel como ser arrugas y acné.
Escuchar música muy alto
Si bien la música es beneficiosa para la salud en general, el escucharla un volumen demasiado alto y especialmente con audífonos puede disminuir la audición