Trastorno disfórico premenstrual

Es una afección más severa que el síndrome premenstrual, cuyos síntomas suelen interferir negativamente en el normal desarrollo de las actividades cotidianas

Trastorno disfórico premenstrual

Es una afección más severa que el síndrome premenstrual, cuyos síntomas suelen interferir negativamente en el normal desarrollo de las actividades cotidianas.

¿Qué es?

El trastorno disfórico premenstrual (TDPM) o síndrome disfórico premenstrual es una forma más severa del síndrome premenstrual (SPM), que se caracteriza por irritabilidad, depresión, ansiedad y tensión antes de la menstruación, que interfieren con las actividades cotidianas.

Causas

Las causas de este trastorno no han sido identificadas, pero los cambios hormonales que se producen a lo lago del período menstrual parecen influir mucho.

La depresión, la ansiedad y el trastorno afectivo estacional (TAE) suelen observarse en algunas mujeres con trastorno disfórico premenstrual.

Aproximadamente el 75% de las mujeres en edad fértil padecen de síndrome premenstrual (SPM) y entre un 2 y un 10% trastorno disfórico premenstrual (TDPM), aunque es más severo en las más jóvenes.

Factores de riesgo

Síntomas

Los síntomas son semejantes a los del síndrome premenstrúale, pero mucho más fuertes e inhabilitantes. Suelen aparecer la semana previa a la aparición de la menstruación y disminuyen luego de unos días del comienzo de la misma. Entre ellos están:

  • Falta de interés por las actividades cotidianas
  • Ansiedad, tensión
  • Tristeza, apatía, en algunos casos ideas suicidas
  • Deseos compulsivos por comer
  • Falta de control, sentimientos de abruma
  • Irritabilidad, furia constante, incremento de los conflictos interpersonales
  • Altibajos emocionales, crisis de llanto
  • Trastornos del sueño
  • Fatiga
  • Problemas de concentración
  • Ataques de pánico
  • Distensión abdominal, mamas sensibles, dolores de cabeza, articulares y musculares

La presencia de cinco o más de los síntomas mencionados pueden indicar el trastorno disfórico premenstrual.

Diagnóstico

Para el diagnóstico del síndrome disfórico premenstrual no existen ni pruebas de laboratorio ni exámenes físicos específicos. Sino que el mismo se realiza en base a una historia clínica, un examen físico que incluye examen de la pelvis y una valoración psiquiatrita para descartar otros posibles problemas.

La evaluación de los síntomas, como éstos se relacionan con el con el ciclo menstrual y el registro durante semanas de los mismos, también puede ayudar para el diagnóstico.

Tratamiento

  • Dieta equilibrada que incluya frutas, verduras, granos integrales, reducción del consumo de azúcar, sal, alcohol y cafeína
  • Suplementos nutricionales, calcio, vitamina B6, magnesio
  • Actividad física regular
  • Buen descanso
  • Uso de antidepresivos (inhibidores selectivos de la recaptación de la serotonina (ISRS)). Hay tres drogas aprobadas por la FDA para tratar este síndrome y aliviar sus síntomas: Sarafem, CR Paxil y Zoloft
  • Calmantes para los dolores de cabeza, menstruales, mamarios, como ser ibuprofeno

Complicaciones

Los síntomas del síndrome disfórico premenstrual pueden hacerse muy severos en algunos casos y entorpecer considerablemente la vida cotidiana de aquellas mujeres que lo padecen.

En un 10% de los casos, aquellas mujeres con este síndrome manifiestan además pensamientos suicidas y la incidencia del mismo es considerablemente mayor en las mujeres que padecen depresión en la última mitad de su ciclo.

Pronóstico

Una vez realizado el diagnóstico y empezado el tratamiento, los síntomas del síndrome disfórico premenstrual desaparecen o disminuyen en la mayoría de las mujeres.