Responsabilidad paterna en la salud de sus futuros hijos

Los espermas masculinos de aquellos hombres que tienen hábitos poco saludables como fumar, beber alcohol, entre otros, podrían ser responsables de transmitir problemas durante el embarazo o en la futura salud del bebé.

Responsabilidad de los padres en la concepción
Foto cortesía de Raphael Goetter

Generalmente se advierte y fomenta que las mujeres embarazadas o aquellas que desean estarlo, tengan hábitos de vida saludables, no fumen, beban alcohol, consuman fármacos, drogas, ni se expongan a sustancias tóxicas o que puedan resultar peligrosas para el feto en formación; en tanto el padre queda fuera de estas recomendaciones. Una investigación ha demostrado que los espermatozoides pueden trasportar potenciales problemas médicos para el bebé como consecuencia de ciertas conductas poco sanas.

Si bien la asociación de este tipo de conductas con la infertilidad masculina está más difundida, ya que hay evidencia que demuestra que el tabaco, la marihuana y la cocaína (reduce la producción de espermatozoides e incrementa las probabilidades de aborto involuntario), entre otras sustancias, disminuyen la fecundidad, no se han relacionado tanto con complicaciones durante el embarazo y en la salud del futuro bebé.

Es así que los futuros padres también deberían comportarse como embarazadas y cuidarse para proteger a su hijo de posibles trastornos en su salud.

Algunos riesgos que las conductas tóxicas del padre implican para el niño:

  • La exposición paterna al plomo, se ha asociado con riesgo de aborto espontáneo
  • El tabaco puede producir daños en el esperma provocando aborto espontáneo y la herencia de un riesgo significativo de desarrollar cáncer
  • La investigación demuestra que el alcohol y el tabaco pueden alterar la forma de los espermatozoides y esto se asocia con una mayor incidencia de aborto espontáneo. El Dr. Marc Goldstein, profesor de Urología y director del Centro para la Medicina Reproductiva Masculina y Microcirugía del New York Hospital-Cornell Medical Center, sostiene que si bien es verdad que los espermatozoides anormales y deformes tienen menos posibilidades de fecundar el óvulo, en caso de hacerlo existen más probabilidades de complicaciones entre estos y el aborto espontáneo
  • Según Bruce Ames, profesor de bioquímica y biología molecular en la Universidad de Berkeley, California, los espermatozoides masculinos se producen continuamente mediante la división de las células a lo largo de toda la vida adulta del individuo y en cada división están en riesgo de sufrir alguna mutación, lo cual significa mayor riesgo de mutaciones genéticas para un hijo por parte de su padre que de su madre

Recomendaciones para los padres de los especialistas

  • Dejar de fumar con bastante antelación a la concepción
  • Una investigación realizada por el Dr. Bu-Tian Ji, candidato de doctorado en el Instituto Nacional del Cáncer (NCI), sugiere que los hombres deberían abandonar el hábito del tabaco para preservar a sus hijos del cáncer infantil. Esta recomendación se basa en una investigación que este doctor realizó con un grupo de científicos, en la que estudiaron 642 casos de niños chinos menores de 15 años con cáncer, a la vez que analizaban otro grupo con similares características pero sin antecedentes de la enfermedad para contrastar. Hallando que los padres que habían fumado durante cualquier etapa de sus vidas fueron 30 % más propensos de concebir hijos que desarrollaran cáncer.

    El Dr. Ji reconoce que puede ser que el aumento del cáncer infantil se deba al humo de segunda mano al que están expuestas las embarazadas y no al tabaquismo del padre. Sin embargo, hay estudios como por ejemplo uno realizado en Inglaterra que relaciona el tabaquismo paterno (no materno) con un mayor riesgo de muerte por cáncer en los niños del Reino Unido.

  • Buena alimentación
  • La alimentación del padre también parece influir en la salud de su futuro hijo. Ya se había asociado la importancia de la vitamina C en la salud reproductiva del hombre pero Bruce Ames, quien investigó la salud reproductiva de un grupo de voluntarios con una dieta baja en vitaminas en un estudio del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), encontró que los espermatozoides de los que tenían una alimentación carente de vitamina C eran dos veces más vulnerables a sufrir algún daño en comparación con aquellos individuos cuya dieta era rica en esta vitamina.

    En tal sentido, se recomienda a aquellos hombres que planean reproducirse, comer de tres a cinco porciones diarias de frutas y verduras, semillas, nueces, germen de trigo y controlar la ingesta de alcohol.