Cómo prevenir los eructos

La aerofagia es cuando se ingiere demasiado aire al comer o beber y con ello se favorece el eructo. Al eructar se alivian síntomas como la acidez e indigestión.

Prevenir el eructo

El eructo es un acto normal que produce el organismo, al igual que la flatulencia, para eliminar el aire del estómago que se traga conjuntamente con los alimentos y bebidas que se consumen.

El aire ingerido se acumula en la parte alta del estómago, provocando que el mismo se estire, desencadenando la relajación del esófago. Esto lleva a que el aire se escape por el esófago y haga presión para ser eliminado por la boca.

Con el eructo se pueden aliviar los síntomas de acidez estomacal, indigestión o las náuseas.

Si bien los eructos son un proceso normal, cuando ocurren con frecuencia o en público pueden resultar molestos, vergonzantes e incluso ser considerados como una falta de educación o un síntoma de una condición subyacente.

Pero pueden evitarse tomando una serie de precauciones. Evitando determinados malos hábitos que favorecen la aerofagia (tragar mucho aire) y que llevan a que se produzca indigestión, sensación incómoda de pesadez estomacal y malestar general.

¿Qué hacer para evitar los eructos?

  1. Evitar mascar chicle
    Este es uno de los hábitos que más favorece el tragar aire y en consecuencia los molestos eructos.
  2. No fumar
    Al aspirar el humo del cigarrillo también se traga aire, el que posteriormente puede hacer que aparezcan los eructos.
  3. Dormir del costado izquierdo
    Esto ayuda a que el gas acumulado en el esófago sea liberado y se alivie esa incómoda sensación de llenura, acidez e indigestión.
  4. Evitar bebidas con gas
    Limitar o remover completamente el uso de gaseosas azucaradas, agua con gas, etc.
  5. Dar un paseo luego de comer
    Para favorecer la digestión, aliviar la sensación de llenura e hinchazón, lo ideal es salir a caminar, a dar un paseo o mantenerse recto, en vez de acostarse o tumbarse en un sillón.
  6. Tratar los trastornos de ansiedad y estrés
    En algunos casos la aerofagia puede estar asociada con problemas de estrés y ansiedad. Estas condiciones llevan a que la persona coma rápido, con nervios y eso facilita que se produzcan los molestos síntomas. Por ello, el tratamiento de estas problemáticas subyacentes, puede contribuir al alivio de los malestares digestivos.
  7. Comer despacio y pequeñas porciones
    El comer rápido y mucho es uno de los principales factores de riesgo para tragar aire y favorecer los eructos. Para evitarlo, se recomienda comer despacio, pequeñas porciones y masticar bien la comida antes de ingerir los alimentos.
  8. Evitar comer alimentos fuertes
    Dentro de estos alimentos se incluyen ajo, cebolla, chorizo, repollo, entre otros.