Cáncer de pulmón, una vacuna puede cambiar todo

El desarrollo de una vacuna para apoyar el tratamiento contra el cáncer al pulmón puede marcar diferencias imporantes.

Cáncer al pulmón
Cáncer al pulmón

El tratamiento contra el cáncer de pulmón requiere de quimioterapia, aunque según un estudio reciente los efectos de ésta pueden verse potenciados por una vacuna que funciona como apoyo al tratamiento principal.

Los autores del estudio han querido ser muy enfáticos y claros en las perspectivas de que salga una vacuna para potenciar el tratamiento del cáncer al pulmón, pues ésta existe pero se encuentra en fase 2 de experimentación, por lo que le queda una fase más por pasar (medicamentos en experimentación requieren de tres fases). De forma lamentable se obtuvieron efectos secundarios graves en los pacientes que utilizaron el tratamiento y la vacuna, pero los científicos insisten en que el asunto es más que factible.

Este tratamiento puede ser, a juicio de los especialistas, la estrategia que lo puede cambiar todo en lo relativo al cáncer del pulmón, por lo que vale la pena terminar todas sus fases de prueba, señaló el presidente del departamento de biología tumoral del Centro Nacional de Genómica funcional del Centro Oncológico e Institución de investigación H. Lee Moffit, Srikumar Chellappan.

Chellappan no dio falsas expectativas y dijo que la posibilidad de mantener la vida con o sin este tratamiento estratégico no cambia o aumenta demasiado la posibilidad de vivir cuando opta por no llevarse a cabo, sin embargo, cualquier aumento de la expectativa de vida se toma como un triunfo cuando se atraviesa por una etapa avanzada de la enfermedad.

En la actualidad se tomó a 148 pacientes que atraviesan por un cáncer de pulmón en etapa terminal, y son tratados con quimioterapia para probar los efectos de la vacuna. Después de seis meses de pruebas el 43% de los que utilizaron la vacuna observaron que el cáncer no avanzó en nada (con tratamiento combinado). El 35% de quienes optaron sólo por la quimioterapia obtuvieron el mismo resultado.

Desafortunadamente los efectos secundarios graves tuvieron una tasa demasiada alta, ya que el 52% de los que usaron la vacuna y la radioterapia los sufrieron, mientras que el 47% que sólo optó por la quimioterapia los sufrió.