Trastorno esquizoide de la personalidad
Trastorno de personalidad que implica indiferencia y aislamiento social.
Trastorno de personalidad que implica indiferencia y aislamiento social.
Se trata de una afección de salud mental, un trastorno de la personalidad, caracterizado por la indiferencia hacia el entorno y el aislamiento social.
La prevalencia es menor al 1% de la población. En general suele diagnosticarse en la edad adulta, aunque puede aparecer en la infancia o adolescencia.
Causas
Las causas se desconocen, pero se sabe que el trastorno esquizoide de la personalidad puede estar asociado con la esquizofrenia, enfermedad con la que comparte muchos factores de riesgo.
Sin embargo, no es tan incapacitante como la esquizofrenia, ya que no produce desconexión de la realidad con delirios o alucinaciones.
Síntomas
- La persona con trastorno esquizoide de la personalidad se demuestra distante y desconectada
- Habla extraña
- Es incapaz de disfrutar o desear tener relaciones estrechas, incluso con miembros de su familia
- Ideas sospechosas o paranoides
- Evita todo tipo de actividades sociales que involucran intimidad con otros
- Ansiedad social excesiva o persistente
Diagnóstico
El diagnóstico generalmente lo realiza un especialista en salud mental basándose en los síntomas y antecedentes del paciente, cuando este busca ayuda.
Tratamiento
El tratamiento del trastorno esquizoide de la personalidad incluye generalmente medicación y psicoterapia.
Los medicamentos pueden recetarse si los síntomas son evidentes. Los pensamientos ilógicos pueden tratarse con medicamentos antipsicóticos en bajas dosis. La ansiedad y depresión pueden tratarse con ansiolíticos y antidepresivos.
Los pacientes con este trastorno pueden presentar problemas con la psicoterapia, ya que el mismo se basa en la incomodidad para entablar relaciones interpersonales. Pero el terapeuta puede fomentar una relación que se funde en la confianza, aceptando la necesidad del paciente de mantener una relación más distante.
Como estas personas, generalmente, presentan problemas para aprender las habilidades sociales, puede ser preciso que en el tratamiento se incluya el enseñarles dichas pautas. Explicar que determinados comportamientos pueden ser vistos por los demás como antipáticos.
El terapeuta también puede enseñar al paciente a reconocer cómo se distorsionan sus pensamientos y percepciones y cómo responder adecuadamente.
Cuando los síntomas son de leves a moderados, con poco apoyo el paciente podría adaptarse con facilidad al entorno. Sin embargo, cuando los síntomas son más graves, el paciente podría tener más dificultades para mantener su trabajo y vivir de manera independiente, ya que podría presentar serias dificultades para realizar actividades diarias como las compras.
Pronóstico
El trastorno esquizoide de la personalidad es una enfermedad crónica que en general no mejora con el tiempo. El aislamiento social, frecuentemente impide que el enfermo busque ayuda.