Torticolis

Es el torcimiento del cuello por causas genéticas, adquiridas o desconocidas

Torticolis
Collarín para tratar la tortícolis

La torticolis es el torcimiento del cuello hacia un lado en el cual el mentón apunta hacia el otro. Puede ser congénita, es decir estar presente desde el nacimiento, como consecuencia de una posición incorrecta durante el crecimiento del feto dentro del útero o de una lesión en los músculos o desarrollarse en la niñez o la adultez.

Causas

  • Genéticas
  • Adquiridas: Como consecuencia de daño en el sistema nervioso, los músculos o la parte superior de la columna
  • Causas desconocida: Se llama tortícolis idiopática

Síntomas

  • Dolor de cabeza
  • Dolor cervical
  • Limitación en el rango de movimiento de la cabeza
  • Rigidez en los músculos del cuello
  • Temblor de la cabeza
  • Hinchazón en los músculos del cuello
  • Hombre de un lado del cuerpo más alto que del otro

Tratamiento

  • Tortícolis congénita
  • El tratamiento en bebés y niños pequeños consiste en estirar el músculo con posicionamientos y estiramientos pasivos. Son muy efectivos cuando se realizan los tres primeros meses de vida.

    La intervención quirúrgica puede ser la solución y realizarse en la etapa preescolar, cuando otros tratamientos han fallado.

  • Tortícolis por daño en el sistema nervioso, los músculos o la columna
  • Debe identificarse la causa del trastorno para elegir el tratamiento.

Los tratamientos para la tortícolis pueden abarcar:

  • Ejercicios de utilización de collarín y estiramiento para los espasmos musculares
  • Cirugía de columna vertebral cuando la tortícolis es consecuencia de vértebras dislocadas
  • Medicación como fármaco anticolinérgico baclofeno
  • Aplicación de calor, masajes y tracción de la columna cervical para aliviar el dolor de cabeza y cuello
  • Inyección de la toxina botulínica para aliviar de manera temporal la tortícolis. En general es necesario repetir cada tres meses

Pronóstico

En bebés y niños es mucho más fácil tratar la afección. Cuando se hace crónica, puede desarrollarse hormigueo y entumecimiento por la presión que se produce sobre las terminaciones nerviosas de los nervios del cuello.

El músculo puede volverse hipertrófico debido a la estimulación y el ejercicio constante.

Complicaciones

  • Síntomas neurológicos como consecuencia de la presión sobre las terminaciones nerviosas
  • Hinchazón del músculo como consecuencia de la constante presión