Píldora anticonceptiva masculina, falta muy poco

Investigaciones recientes demuestran que las píldoras anticonceptivas para hombres podrán comercializarse en 3 ó 5 años más.

Sexualidad pareja
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De acuerdo a diversos estudios científicos, queda muy poco para llegar a producir la píldora anticonceptiva masculina que provoca el detenimiento de la producción de esperma en el hombre mientras se toma, lo que por primera vez traspasaría la responsabilidad sobre el control de la natalidad a ellos.

La píldora ya existe como tal, aunque todavía no se han terminado las pruebas por lo que científicos del centro médico de la Universidad de Columbia dicen “falta poco” para que llegue a ser lanzada como nuevo producto. Por el momento se está perfeccionando su funcionamiento y ello podría demorar entre 3 y 5 años, aseveró Jonathan Masel – líder de la investigación.

Parte de los beneficios y perjuicios de esta nueva droga, según los experimentos hechos en ratones, es que se consigue detener la producción de esperma (con bajas dosis) y no hay efectos secundarios importantes, por lo que con tan solo dejar de consumirla se volvía a tener el mismo rango de fertilidad que antes de utilizarla.

Uno de los aspectos en que sí se diferencia a la clásica pastilla conceptiva que usan las mujeres actualmente es que éstas no contienen hormonas, pues lo que hace es “imitar que hay una deficiencia de vitamina A”, lo que es una causal de infertilidad en los hombres.

Aunque todos los estudios indican de que es posible sacar esta píldora en un plazo no mayor a 5 años, las interrogantes a nivel comercial son menos entusiastas pues no se sabe si habrá mercado para el producto. Traspasar esta gran responsabilidad a los hombres no es un argumento comercial convincente para los grandes inversionistas.

Conforme lo anterior, podríamos estar en presencia – una vez más – frente a un increíble trabajo científico que puede resultar sumamente eficaz para controla el nacimiento de niños en condiciones inadecuadas, pero que no llegará a buen puerto por políticas comerciales o expectativas financieras “poco convincentes”.