Manejar el uso del alcohol y las drogas en la adolescencia

Conocer las señales que indican consumo, estar atentos a ellas, hablar con los adolescentes al respecto, apoyarlos y buscar ayuda profesional.

Manejar el uso del alcohol y las drogas en la adolescencia

El consumo de alcohol y drogas en los adolescentes es un problema social importante. Cada vez comienzan a consumirlos a edades más tempranas trayendo así serías consecuencias para su salud física, emocional y su relación con el entorno.

Si bien generalmente se le tiene más temor a las drogas ilegales (marihuana, cocaína, etc.), lo cierto es que la droga más consumida es la legal, el alcohol, que por la facilidad con la que se accede a él y la gran publicidad que se hace de él se ha transformado en un verdadero problema para los adolescentes de casi todos los países del mundo.

Para poder manejar el consumo de estas sustancias y ayudar a los adolescentes es fundamental poder reconocer cuáles son las señales que indican que las está usando y poder responder responsablemente al respecto.

Los tres pasos principales que se deben seguir en este sentido son:

  1. Reconocer las señales que indican el consumo
  2. Hablar con los adolescentes sobre el consumo de sustancias
  3. Recurrir a la ayuda profesional adecuada para tratar el problema de abuso de sustancias

Diferentes tipos de consumo de sustancias en la adolescencia

  • Experimentación: hay grandes posibilidades de que la mayoría de los adolescentes en algún momento estén cerca del alcohol o las drogas y se sientan tentados de probarlas. Algunos de ellos sólo lo harán como forma de experimentar, de ver de que se trata y tal vez nunca pase de eso y jamás tengan problemas con el uso de éstas
  • Abuso: hay algunos adolescentes que de la experimentación pasarán al consumo usual de sustancias, es decir al abuso. Esto traerá como resultado problemas en los estudios, en la casa, etc.
  • Dependencia: la dependencia se hace evidente cuando el consumo ocupa la mayor parte del tiempo y de la atención del adolescente, alterando e interfiriendo directamente con el resto de sus actividades. La adicción puede ser física y/o psicológica y no se puede manejar sin ayuda. Es una enfermedad crónica que progresivamente avanza y puede ser fatal

Señales de uso habitual de sustancias:

Es fundamental que los padres y adultos que están cerca de los adolescentes reconozcan y estén atentos a las señales que indican el uso regular (abuso) de drogas y/o alcohol. Entre ellas están:

  • Ojos rojos, risa fácil, hambre voraz repentina, somnolencia: estos son algunos indicios de consumo de marihuana. Muchas veces los adolescentes para ocultar el signo más visible que es el enrojecimiento de los ojos, utilizan lentes oscuros o gotas para los ojos
  • Falta de interés por los estudios, bajo rendimiento académico, ausencia escolar
  • Nuevas amistades que no son de la escuela ni del entorno habitual
  • Manchas de pintura o de otras sustancias en las manos, rostro o la ropa del adolescente, podría ser una señal del consumo de inhalantes
  • Papeles o pañuelos mojados con productos químicos puede indicar la inhalación de vapores

¿Cómo actuar frente al consumo de sustancias por parte de los adolescentes?

  1. El primer paso y más importante es hablar franca y honestamente con el adolescente sin enojarse o culpabilizarlo directamente por sus conductas. Tratar de hacerlo sentir cómodo, en confianza, apoyados y contenidos, como para lograr abrirse y hablar al respecto
  2. En segundo lugar hay que buscar ayuda profesional. Dependiendo del grado de consumo, de abuso, será el tipo de tratamiento que necesitará. Si el adolescente está sólo en la etapa de experimentación tal vez sólo con hablar abiertamente con él sea suficiente. Sin embargo, si el uso de sustancias ocupa un lugar significativo en su vida, se trata de abuso y puede ser necesario recurrir a un profesional en estos temas. Al igual que si ya hay un problema de adicción, ha de ser precisa la intervención de profesionales expertos en adicciones y tal vez algún tratamiento de desintoxicación

Las recaídas son comunes y esperables, no deben ser tomadas como un fracaso. Salir de una adicción no es fácil, hay que recordar que se trata de una enfermedad y la recuperación es lenta, progresiva y lleva su tiempo.

Algunas medidas de prevención

Los padres pueden contribuir a la prevención del consumo de sustancias por parte de sus hijos adolescentes siguiendo las siguientes recomendaciones.

  • Hablando con los adolescentes abiertamente sobre el alcohol y las drogas, sobre las consecuencias de su uso excesivo y al respecto del comportamiento que se espera de ellos en relación al consumo de alcohol y drogas
  • Fomentar el deporte y las actividades sociales es muy importante para mantenerlos alejados de las drogas y los abusos
  • Establecer límites claros y exigir que se respeten como ser horarios de llegada, etc.
  • Estar atentos al entorno del adolescente, conocer sus amistades, pero teniendo cuidado de no invadirlo
  • Predicar con el ejemplo: como en todos los ordenes de la vida no se puede pretender aquello de “haz lo que yo digo pero no lo que yo hago”. Por más que sean los padres, si el adolescente está inmerso en un hogar en el que sus padres abusan del alcohol, el tabaco, las pastillas para dormir, etc., es decir que son propensos a los excesos y las adicciones no pueden pretender que su hijo adolescente tenga una conducta diferente